Vecinos del Alto Río Senguer, en la Patagonia argentina, han encontrado el cuerpo congelado de un hombre custodiado por su perro. El can cuidó sus restos de los depredadores durante 23 días.
A mediados de julio Bernardo Leónidas Quirós viajaba en un automóvil junto con su esposa e hijos por el sur de Argentina para encontrarse con su hermano. Al detectar un problema eléctrico en el coche, el hombre junto a su perro 'Talero' salió en busca de ayuda, mientras su familia permaneció en el vehículo.
Cuando Quirós se alejó del lugar empezó un temporal de nieve. Supuestamente, el hombre se desorientó por la nevada y tomó otro rumbo.
El cuerpo fue hallado 23 días después por el marido de una prima del fallecido, que reconoció al pastor ovejero alemán de Quirós, y dio aviso de forma inmediata a la comisaría del lugar.
"El cuerpo de Quirós fue encontrado debajo de una mata de calafate gracias a su perro, que permaneció fiel junto al cuerpo y cuando pasó la cuadrilla de búsqueda le salió al cruce", dijo más tarde el comisario inspector.
La Policía supone que Quirós falleció por congelación, ya que no había ningún signo de violencia en el cuerpo. La esposa y sus dos pequeños hijos habían sido rescatados con anterioridad sanos y salvos.
Cuando Quirós se alejó del lugar empezó un temporal de nieve. Supuestamente, el hombre se desorientó por la nevada y tomó otro rumbo.
El cuerpo fue hallado 23 días después por el marido de una prima del fallecido, que reconoció al pastor ovejero alemán de Quirós, y dio aviso de forma inmediata a la comisaría del lugar.
"El cuerpo de Quirós fue encontrado debajo de una mata de calafate gracias a su perro, que permaneció fiel junto al cuerpo y cuando pasó la cuadrilla de búsqueda le salió al cruce", dijo más tarde el comisario inspector.
La Policía supone que Quirós falleció por congelación, ya que no había ningún signo de violencia en el cuerpo. La esposa y sus dos pequeños hijos habían sido rescatados con anterioridad sanos y salvos.
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