Murat Telibékov, quien encabeza la Unión de los Musulmanes de Kazajstán, afirma que los yernos influyentes cada vez tienen más poder en el país. Si antes los maridos de las hijas de altos funcionarios públicos permanecían en la sombra, ahora se convierten en políticos y empresarios. Sus trayectorias exitosas parecen manifestar que para conseguir algo en esta vida basta con casarse bien. Murat Telibékov está convencido de que los hombres más capaces y talentosos deberían luchar por el honor de ser yerno de un alto cargo:
—Tiene que ser algo parecido a la subasta de Sotheby's, pero en lugar de obras de arte o joyas se subastarán las novias. Hoy muchos hombres aspiran a ser "yernos influyentes". Entonces que compitan por ello de una manera democrática y transparente. Algunos proponen introducir la práctica del tradicional juego ecuestre «kokpar». Consiste en arrebatar al equipo contrario el "boz", que es una piel de cabra sin cabeza y sin extremidades. De la misma manera los pretendientes lucharán por la novia – "arrebatándola" al rival, llevándola lejos.
 El presidente de la Unión de los Musulmanes de Kazajstán propone además organizar una boda lujosa para los novios y hacerles un regalo especial: por ejemplo, el paquete de control de las acciones de algún banco nacional importante.
Si el proceso de elección del yerno de un político o funcionario llega a ser democrático, libre y tolerante, Kazajstán será un ejemplo a seguir en todo el mundo, subraya Murat Telibékov.
Los propios kazajos no tomaron la idea en serio. Es más, su autor ya fue acusado de atentar contra la dignidad de la mujer y del país. Sin embargo, Telibékov está contento: afirma que su único objetivo fue llamar la atención al problema en una forma grotesca.
Fuente: spanish.ruvr.ru